sábado, 27 de noviembre de 2010

CB Clavijo- Illescas (84-74). Relajación de vuelta al campo base



No es rara en absoluto en muchos aspectos de la vida esa relajación, bajada de guardia, que a uno le entra cuando acaba de superar un periodo de exigencia y tensión muy elevadas. Quizá éste sea el argumento que más se ajusta para explicar la rara victoria del Clavijo el viernes ante Illescas, para un servidor el partido más soso que ha visto del equipo esta temporada. Cabe recordar que el equipo ha pasado un último mes de infarto, sacando adelante con mucha brillantez dos partidos en casa ante los potentes ADT Tarragona y Andorra, una derrota por medio ante el ogro Tijola, y otro buen triunfo, con remontada incluida, en la comprometida visita a Prat, el domingo pasado. No ha faltado quien ha hablado de 'Tourmalet' para definir ese calendario, así que siguiendo con la metáfora bien se podía decir que tras coronar la cima y tener un dificil descenso, el Clavijo llegó este viernes a un campo base llamado Illescas.

Así que valdrá la excusa, más que nada porque se sacó adelante el partido, que es lo que cuenta, y además se hizo con relativa facilidad. Illescas concedió al Clavijo el beneplácito de no achuchar nunca en exceso pese a los muchos errores locales en forma de pérdidas de balón, malas selecciones de tiro, precipitaciones y falta de un ritmo homogéneo en muchas fases. Y todo ello sonando a poca concentración en varios ratos.
Los toledanos tampoco opusieron demasiado. Son un grupo de jóvenes jugadores que de momento apuntan cosas interesantes pero sin la continuidad necesaria que sí adquirirán con tiempo de formación. La única excepción, el veterano Héctor García con varios años a las espaldas en ACB y LEB Oro, y barra libre aquí para tirarse hasta las zapatillas.

El planteamiento por ello no parecía complicado. Apretar en defensa y parar a ese único peligro constante probablemente bastaba para superar a un equipo que de por sí lleva toda la liga con problemas para anotar. Lo demás ya llegaría, considerando la inercia que pone la versatilidad ofensiva del Clavijo por encima de los 80 puntos por partido.
El problema es que no se terminó de hacer nada de eso. A Sala le costó cuatro minutos sentar a todo su quinteto inicial (salvo Swanston, que llevaba 8 puntos en el inicio) y meter a la segunda línea: Illescas empezó anotando muy cómodo y Héctor García tirando sin grandes oposiciones, mientras los locales andaban espesos e imprecisos a la hora de correr (19-21). El tono feo y tosco del juego también le favorecía mucho más a Illescas, el Clavijo pocas veces estuvo cómodo.
La segunda línea sí estuvo mucho más acertada en esos minutos, con un juego más controlado a cargo de Molina (muy buenos minutos) y el dúo Chufi-Herrero dominando la zona. Con todos ellos en pista el partido parecía romperse (35-24, minuto 14) pero no iba a haber la necesaria continuidad: casi sin quererlo, Illescas estaba otra vez por delante poco después (36-38).

No eran para estar contentos los 41 puntos (18 de ellos para Héctor García) que los castellano manchegos llevaban al descanso (46-41), tampoco sin hacer grandes cosas, un tipo de juego uniforme y asentado en balones a García y a los interiores Chubrevich y Biyombo. Muy buenas maneras el primero, demasiado aparatoso el segundo, pero también efectivo para el caso.
Lo mejor del Clavijo se recuerda en la vuelta de vestuarios, y en su propia pintura. Claves ahí fueron Borja Arévalo y Alfredo Ott, que ataron en corto, al fin, a Héctor García en el tercer cuarto. Sin él y con Biyombo asediado por las faltas, Illescas se diluyó mientras el Clavijo iba abriendo hueco (69-55), más un goteo sin grandes alardes que el avasallamiento visto en otras ocasiones; aunque con mucha gente anotando, eso sí (6 jugadores acabarían por encima de los 10 puntos).
No hubo tampoco para mucho más, en un partido sin historia. El Clavijo alcanzó la máxima de +20 (84-64) a falta de 3 minutos y Christian García apareció en el parqué. Incluso con ese panorama halagüeño el final dejó mal sabor, con un parcial de 0-10 de Illescas marcado por pérdidas locales extrañas y triples sin oposición. La última muesca de un partido donde casi toda la tensión la puso el cuerpo técnico local. No debe ser un referente para el futuro inmediato, menos aún la próxima jornada en Plasencia, donde el Clavijo precisará de recuperar su versión del último mes para mantener el liderato.

C. B. Clavijo: Kyle Swanston (12), Alfredo Ott (11), Matt Witt (11), David Mesa (6), Sidnei de Santana (16), cinco inicial, Quique Suárez (10), Roberto Molina (1), Juan Herrero (3), Chufi Rodríguez (12), Borja Arévalo (2)y Cristian García.
Illescas: Ondrej Kohout (7), Jonathan Machuca (4), Alexey Chubrevich (8), Julio Sosa, Héctor García (26), cinco inicial,Javier Simón (6), Adrián Casas, Orellano, Adrián Laso (12) y Bismack Biyombo (11).
Parciales: 25-21, 21-20 (46-41, descanso), 23-14 (69-55), 16-19 (84-74, final).
El crack: para mí Alfredo Ott, el más completo en ambas zonas. Sus estadísticas de 11 puntos, 3 rebotes y 1 robo no reflejan su gran trabajo defensivo sobre Héctor García ni su intensidad en ataque y sus puntos en momentos importantes. Junto a él, caben destacar los grandes minutos de Chufi en ambas pinturas y su capacidad de anotación (12 puntos y 5 rebotes en 12 minutos).
La revelación: los que lo vieron dicen que Roberto Molina fue muy importante en la victoria el domingo pasado en Prat. Ayer ante Illescas, en un partido que el Clavijo supo correr en muy pocos momentos, dio criterio y organización a la dirección del equipo y estuvo intenso en defensa. Sólo le falta añadir peligro anotador a ese completo trabajo en el resto de aspectos.
El bluff: tan habituales en el apartado de 'crack', esta vez fueron de lo más flojo del equipo. Tanto Matt Witt como David Mesa no tuvieron su mejor noche. El primero, pese a sus buenas rachas anotadoras de siempre, no controló el partido en estático; y el segundo tendió a perderse en jugadas imposibles ante las torres visitantes y perder balones (7). Llama la atención decir esto cuando Witt acaba con 11 puntos y 6 asistencias, y Mesa con 6 puntos y 10 rebotes; es más una cuestión de sensaciones.

4 comentarios:

  1. Sobre Rober, buen partido en Prat, pero os quiero decir que lo podeis ver en youtube...y todos podeis opinar, para que no demos lugar a equivocos...

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  2. Coincido contigo Quique. Partido de sensaciones extrañas. Demasiada especulación Se sabían superiores, pero no se reflejó ni en juego ni en intensidad, salvo contadas excepciones.
    Ott se lo tomó muy en serio y defendió como él sabe y contagiando finalmente al resto del equipo.

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  3. No sé, está claro que no es un partido para tener en cuenta para el futuro, en términos de imagen.
    Creo que me he explicado mal en la crónica, pero quería decir que la mayor tensión que el Clavijo mostró durante el partido provenía del cuerpo técnico, los jugadores fueron mucho a tirones. Tuve además la impresión de que varios de los cambios esta vez fueron más en la dirección, por decirlo así, de 'castigo' a alguien que lo hacía mal, que en la de variante táctica. Recuerdo un par de jugadores que entraron a pista y en dos posesiones estaban de vuelta al banco.

    Con todo, eso sí, otros 84 puntos en el zurrón. Algún día de estos contaré los partidos en la temporada pasada que el equipo superó la barrera de los 80 puntos, para comparar. Este año llevan anotando 80 o más en 7 de los 9 partidos, aun jugando mejor o peor. Creo que tiene un mérito enorme. Saludos.

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  4. quique para cuando mas entrevistas?
    Las estamos deseando... jijiji ;)

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