Guadalajara- CB Clavijo. Última salida trampa de la temporada

Pues bien, como algunos ya habréis leído, la entrevista anunciada para solobasket era a nuestro Quique Suárez, este fin de semana la saco en el blog versión extendida, para aprovechar la resaca lectora del partido de esta noche (20.45) en Guadalajara.

Porque en estos momentos, hay que centrarse en lo que toca. El Clavijo juega hoy en la localidad alcarreña su vigésimo quinto partido de temporada, es decir, a falta de cuatro para acabar todo. Vale que a estas alturas, no podemos dejar de escrutar el horizonte: el viernes próximo tenemos un a priori asequible Clavijo-Regal Barça, y a la vez el inicio del tourmalet mallorquín, con su visita a la durísima cancha de Tíjola; y dentro de quince días el crucial Mallorca-Clavijo en las islas.
Todo muy bien, pero inservible en el momento actual, en el que hay que hablar de una visita riojana asequible y dura a la vez. CB Guadalajara es uno de los cuatro equipos que cierra la clasificación (7-17), pero a la vez uno de los más curiosos si profundizamos en su situación actual. Un dato sobresale por encima del resto: pese a sus 17 derrotas en liga, su balance entre puntos anotados y recibidos es tan sólo de -62. Nada que ver con el de sus compañeros de tabla, Lan Mobel (-147), Santurtzi (-145), Illescas (-140), e incluso Coruña, que lleva un partido más ganado (-193).

Ese dato no debe dejarse pasar: habla de un equipo correoso, que nunca deja de competir y aprieta hasta el final, incluso en los partidos más adversos. En toda la temporada, sólo acumula una paliza en contra, ante el FEVE Oviedo hace un par de meses (83-62, -21); lo siguiente fue su derrota en casa ante Mallorca (-14), y en Santurtzi, en la primera vuelta (-12). Tras todo eso, ha perdido nada menos que ¡12! de sus 17 partidos por diferencias inferiores a los 10 puntos. Precisamente, el Clavijo está entre los pocos que le han ganado con cierta holgura (81-70, en la primera vuelta, en Logroño).
Más cosas: en su campo ha ganado tantos partidos (6) como los que ha perdido (6), mientras que a domicilio sólo sacaron el triunfo en Prat (70-71). También conviene relativizar todo: de los 'grandes' de la liga, sólo Tíjola ha perdido en Guadalajara (84-66). Andorra, Mallorca, Tarragona y Plasencia han ganado allí, incluso otros como Illescas.

Dejemos atrás los números. La plantilla alcarreña es una de las más curiosas de la liga, con algunos jugadores (Rubén Íñigo, Sergio Fernández) que cumplen una década en sus filas, incluyendo su militancia en este equipo en el mismísimo debut del Clavijo en LEB Plata, hace 7 años (por ahí también andaba un tal Sidao...). Es un bloque modesto y sin grandes pretensiones que poco ha cambiado en los últimos años. Roberto Núñez (ex Real Madrid, Italia...), Jorge Barra o Arjonilla son otros 'clásicos' del equipo.

No es lo mismo sin Lawal...

El análisis de la plantilla se puede ver pinchando aquí, aunque ya no es del todo exacto. Guadalajara partió este año con la continuidad del bloque habitual, y apostando bien por los americanos: el ex Clavijo Deforrest Riley-Smith (duda hoy) y, especialmente, Shane Lawal. El pivot nigeriano dominó ampliamente la competición en la primera vuelta, siendo el máximo reboteador de la liga, con medias estratosféricas. Pero la penuria económica del club llevó a una lastimosa situación: en enero tuvieron que cortarle, por no poder garantizarle el sueldo hasta final de temporada.
Llegó un primer recambio: Malick Fall, cedido del Clínicas Rincón Axarquía de LEB Oro. Durante un par de meses ayudó al equipo, con buenos números aunque no tanto como los de su antecesor. Y llegó el segundo palo: en febrero, Clínicas Rincón (filial de Unicaja de Málaga) perdía a su pívot Sinanovic, rumbo a Málaga, y reclamaba la vuelta de Malick Fall para cubrir su hueco.
El duro golpe aún tuvo última respuesta, a muy pocos días del final del periodo de fichajes: llegaba el pivot nigeriano Bayo Arigbon (1,97, 24 años), procedente de la liga israelí. Dicen que es bajito pero un portento físico, aunque sin embargo aún no ha tenido un rendimiento fiable en Guadalajara: en dos partidos jugados, promedia 5 puntos, 2 rebotes en 13 minutos, con muchas pérdidas y acumulación de faltas. Ante estas vicisitudes, el veterano Sergio Fernández se está multiplicando con Pablo Rodrigo en la pintura alcarreña. Esperemos que no explote el nigeriano hoy.

El último detalle es que Guadalajara ha cambiado su pabellón de juego habitual, el Palacio Multiusos Aguas Vivas, por el pequeño Polideportivo Municipal David Santamaría. Desconozco los motivos como para elocubrar sobre posibles estrategias deportivas :-)
Y eso es todo. Queda animar a muerte, los que vayan y también los que se queden en Logroño, aunque sea desde la distancia.