jueves, 9 de diciembre de 2010

De charla con SIDAO DE SANTANA, ese ciudadano español 'de 2,15, negro y con los pelos locos' (pt. 1)


Un español "de 2,15, negro y con los pelos locos", como él mismo se define. Español, sí, aunque noha pasado a apellidarse 'Santanez', sino que sigue como todo el mundo le conoce: Sidnei De Santana, o Sidao, como prefieran.

El center del Clavijo completó hace un par de semanas todo el proceso de nacionalización como español, tras dos largos años de trámites y papeleos. Ahora en su documento de identidad figura oficialmente algo que él "ya se sentía desde hace mucho tiempo". Llegó desde Brasil con sólo 19 años de edad a España, y cumple sus siete años en el país, los últimos tres en Logroño con su familia, donde es "muy muy feliz". Como bien dice, su inmensidad física le hace imposible pasar desapercibido allá donde va; y a la vez, la cercanía de una conversación desvela una humanidad tremenda también como persona, un tipo amable y muy cercano, lleno de historias y anécdotas donde desde luego no escatima risas y buen humor. Un placer conocerlo en persona.

Como la conversación digamos que se alargó un rato (por cierto, el guión se me fue a tomar por saco a la tercera pregunta, jejeje), he creído oportuno partir la entrevista en dos. La primera, en la que habla principalmente de su lado profesional, es la que va a continuación. La segunda, en la que hablamos de su visión del Clavijo y su lado más personal, la dejo para el viernes. Creo que no tienen desperdicio ninguna de las dos. Que las disfruten.

*Fotografías cedidas amablemente por el gran Jonatan Gonzalez. Muchas gracias!!

-¿Cómo sienta lo de 'ciudadano español'?

-Ya me sentía así, vivo las costumbres desde que llegué a España. Llevo ya siete años con mi mujer y mi hijo, me he acoplado muy bien a estas costumbres, me gustan. Los sitios que he estado son muy parecidos a Brasil, la gente es muy cálida y acogedora, la comida muy buena.

-¿Ha sido muy largo el trámite?

-Llevo dos años esperando. Te piden de todo, no te puedes imaginar, ha habido papeles que mi familia ha tenido que mandar dos o tres veces porque caducaban... y cada vez que te piden una cosa, te piden otra. Lo mejor fue cuando juré la bandera, que podías cambiar de nombres y todo.

-¿No pensaste ponerte Ramón Martínez o algo así?

-¡No! no creo, lo dejo como Sidnei, que ya estoy acostumbrado (risas).

-Llegaste muy joven a España.

-En 2003, con 19 años. Estaba jugando el campeonato nacional de Brasil, y un agente me dijo si quería jugar un torneo de verano en España. Así que cogí las zapatillas y me las tiré al hombro. No pudo ser ese torneo, pero Guadalajara me fichó para esa temporada. Jugué muy poco ese año, tuve una lesión muy grave en los dedos de los pies, que cada 2-3 meses tenía que estar parado. Queda mal sabor de boca.

-Aparte, ¿cómo se adapta un 'niño' brasileño a un país diferente?.

-Lo único que sabía en español era 'mido 2,15' y 'hola soy Sidao'. Fue todo muy rápido, cosa de tres semanas. Aprendí a hablar con los papeles de la publicidad de los supermercados: cogía publicidad y miraba qué era la comida. Luego, había un restaurante y pedía toda la semana pollo, viendo el dibujo. A la otra semana veía el dibujo de la carne y pedía toda la semana carne. Lo que no me gustaba lo iba apartando de la lista, y así fui aprendiendo español.

-Acabarías aburrido del pollo y la carne.

-Ya te digo, pero era más por supervivencia (risas).

-Por cierto, antes de seguir: viniendo del país que vienes, no me digas que no diste en ningún momento unas patadas al balón.

-Sí, yo jugaba al futbol de hecho, mi hermana jugaba a baloncesto. Pero fui creciendo, creciendo... y la pelota me pasaba por debajo de las piernas, no tenía sentido (risas). Soy de Salvador de Bahía, y allí no hay mucho baloncesto, así que me fui a Sao Paulo, con 15 años, y a raíz de allí me vieron, jugué un par de torneos en Italia e Inglaterra y me vine a España.

-Por cierto, ¿sabías que tu primer partido en España fue contra el Clavijo?

-¡Qué fuerte! no lo sabía, que curiosidad, ¿no? ¡qué buena! En ese equipo había un americano, Pablo Machado, que era el titular; y estaba Sergio Fernández, el 'topo', que sigue ahí; Carlos Braña, Rubén Íñigo, Diego Pérez, Javi López... tengo contacto con todos, porque la Navidad siempre estamos allí y me gusta mucho el sitio... la miel es muy buena.

-En Guadalajara estuviste dos años, luego empezaste a jugar en Lliria.

-Sí, Fede Pozuelo fue el primer tío que apostó por mí, por mi estilo de juego. Tenía un estilo con un 4 abierto tirador, que era Fran Pérez, uno de los mejores pasadores. Me salió un año redondo, tuve un montón de ofertas. Pero el equipo necesitaba dinero y vendió la plaza a Cáceres, y con ella nos fuimos allí Felipe Gruber, Manu Valdivieso y yo. El proyecto en Cáceres era muy bueno pero no acompañaron los resultados, y empezaron a hacer muchos cambios en la plantilla (Harper Williams entre otros)... En febrero me fui a Tarragona, porque Cáceres quedaba a 700 kilómetros de mi casa (mi mujer vivía en Valencia en esa época) y deportivamente ya no me convenía. Esteban Albert era el entrenador en Tarragona y allí coincidí con Jonathan Barceló, Carles Bravo, Quique Garrido, John Floyd... era un equipazo, nos quedamos a puertas del play off.

-Y tras esa temporada, llegaste a Logroño.

-Sí, y estoy muy muy contento aquí. Es una ciudad muy buena, muy acogedora, y apuestan por mí, me dan confianza. Sé cuál es mi rol en el equipo: quieren que rebotee, que defienda y que las que coja las meta para abajo. Jesús Sala deja muy claro lo que quiere de ti. El equipo va muy bien.

-Recuerdo que tu fichaje fue de última hora, a muy poco de empezar la liga.

-Sí. Iban a fichar a un cedido de Zaragoza (N. del A.: las crónicas hablaban de Blaz Creznar). Pero cuando Jesús me llamó por teléfono fue todo muy rápido. En una semana lo solucionamos todo. Me parecía un buen proyecto, su equipo siempre está a las puertas, siempre allí arriba. ¿Quién no quiere eso?

-Tengo que preguntártelo, pero aquí llegaste con cierta fama de jugador conflictivo.

-Así es. Me pusieron una fama en Guadalajara y me ha costado muchísimo quitarla, a lo mejor hay entrenadores que aún lo piensan. De verdad que tienen que conocerme. Otra cosa es que gesticule mucho y viva mucho el baloncesto, soy un jugador muy enérgico muy grande, se me ve mucho. Es muy difícil jugar siendo muy grande, siempre te cae todo a ti, todas las faltas son tuyas; en los empujones que la gente se tira se pitan... y se ve muchísimo, veo mis vídeos, y es normal, lo entiendo. Si fuera pequeño haría lo mismo.

-De hecho, ¿qué tal tu idilio con los árbitros?

-Bien. Hablamos muchísimo, creo que tengo buena relación con todos, todos me saludan muy bien, hablan conmigo de buen rollo, pero pasa lo que pasa. Ahora está bien la cosa, no me puedo quejar, gracias a Dios que se están olvidando de mi, y ojalá siga muchos años. A lo mejor, los pelos que me los ven y se olvidan de pitar la falta (risas).

-Las aficiones rivales sí que toman nota y parecen saber muchas veces en quién central sus silbidos, ¿no crees?

-A mí me encanta que me piten, cuanto más me pitan, más me motivan los partidos, más me concentro. Creo que la presión no me afecta, gracias a Dios. Cuanto más me abuchean, más centrado estoy en mi trabajo.

-Cuando llegaste fue para dar descanso a Chufi Rodríguez; en lo sucesivo las tornas han ido cambiando progresivamente.

-Yo ya sabía a lo que venía entonces. Mi opinión es que es el entrenador quien tiene el problema, cuando cuenta con dos pívots que están al mismo nivel. Lo que sí, nosotros entrenamos a muerte: si nos ves entrenar, Chufi y Sidao están al 100% cada día, y luego cualquiera de los dos puede jugar sus 20-25 minutos.

-Os habréis sacudido de lo lindo.

-¡Siempre! pero nos respetamos, él me pega, yo le pego. Si yo me voy con moratón a casa, él también (risas). Sabes que son lances, que es sin querer, no pasa nada, es nuestro trabajo, el contacto... Luego nos vamos a tomar Acuarius por ahí y tan amigos, tomamos mucho de eso (risas).

-¿En qué dirías que has mejorado en estos tres años?

-Cada vez soy un poco más importante en el equipo... me siento así, a lo mejor me siento yo solo así (risas)... Bueno, ¡es que me lo dicen! Lo primero, me gusta defender un montón, y adoro machacarla, es mi jugada favorita. Pero estoy feliz si cojo un rebote y el equipo mete un contraataque. Y la filosofía de este año es ésta, yo reboteo y que los pequeños corran. En otros años tenía mucho más protagonismo en ataque, este año es totalmente diferente. Creo que supe acoplarme lo más rápido posible.

-¿Fue duro para un tío de 2,15 hacerse a este estilo de correr y correr?

-Nadie pensaba que no iba a poder adaptarme. Es que es totalmente diferente: estás acostumbrado a jugar en estático, pero ahora con Matt, con Kyle, con David que corre como un toro, el equipo busca correr, ir al espectáculo, el 'showtime'.

-Todo el mundo dice que 'Sidao es un pívot dominante', pero ¿ha habido algún pívot al que no hayas podido dominar?

-Um... me gusta mucho Ronald Thompson, en ADT el año pasado y Coruña ahora. También me gusta Justin Howard de Andorra... pero es que no hay cincos, no hay pívots gigantes en la liga. Dominante es Stevie Johnson pero es un 4. Rob Johnson (Tijola, Andorra) también es muy bueno.

-Un 'detalle' estadístico. Todos estos años has promediado un 60-70% desde el tiro libre, y éste andas por encima del 80%.

-He estado con un amigo en verano entrenando muchísimos tiros libres. Estaba de chapa y pintura (N. del A.: pasó por el quirófano para solucionar sus molestias de la temporada anterior), así que lo único que hice fue entrenar tiros libres. Pero eso es algo de cabeza, psicológico, yo siempre he tirado igual. Eso sí, en los finales apretados ves la canasta más pequeña, pero lo tiras igual, debes enfocarte a ella, puedes llamar a los santos que quieras pero lo tienes que meter tú, nadie te va a ayudar.

-¿Y qué te falta por mejorar?

-Muchas, muchas cosas. Tengo que desplazarme lateralmente más rápido, la continuación del bloqueo directo... Hay muchas más cosas pero tampoco es cuestión de dar pistas a los rivales (risas).



6 comentarios:

  1. NIKY:
    Muy grande Quique.

    ResponderEliminar
  2. Venga Quique la segunda parte. Por pedir que no sea.

    ResponderEliminar
  3. Esta noche o mañana por la mañana la subo sin falta.

    -Por cierto, el plazo para apuntarse a la quiniela ACABA MAÑANA VIERNES A LAS 20.30, y sólo estamos 4 apuntados por el momento. Ya sé que ha sido una semana rara, pero anímense!!

    Saludos!

    ResponderEliminar
  4. Este tio es un crack !!! cada vez me gusta mas,es el jugador mas importante de este equipo, solo hay que verle jugar,e ahora veo que es todo un crack fuera de la pista. Suerte tio y a la oro ya.....

    ResponderEliminar