Clavijo- Básquet Mallorca (74-90). Tras la tempestad...

Pues ya estamos aquí (lamento el retraso). Un día de margen, por otro lado, también viene bien para dejar atrás la resignación inicial y ver las cosas con algo de perspectiva, más en frío. Además, para escuchar opiniones de todo tipo, como las que se han dejado en este blog, y otras muy curiosas, incluso del tipo de 'hacen falta fichajes', 'la plantilla está descompensada', 'no hay equipo para ascender, etc.'. Nunca viene mal una derrota para que afloren las 'carencias'.

Mi humilde opinión, después de todo y sin tremendismos, es que el Clavijo no hizo su peor partido de la temporada, pero el rival esta vez era de los gordos, y además tuvo su día. Me refiero con ello a esos triples desde 9 metros empalmados de forma casi consecutiva en momentos claves, todos bien defendidos, por cierto; o esas muchas jugadas que acababan en canasta al borde de la posesión, también tras buenas defensas. No fue, desde luego, el mejor día del Clavijo, pero es que Mallorca además de sí tener el suyo, estuvo tocado por la varita. Para mí la derrota fue justa, sí, pero demasiado dura para los méritos y deméritos propios.

Al Clavijo personalmente le vi fases de buen juego y otras de desconcierto, principalmente en la parcela ofensiva. Sobre todo, casi nunca se les vio cómodos dentro del partido, ni siquiera en las fases de correr; y sí precipitados en muchas fases y hasta nerviosos en algunos momentos, lo que derivó en inseguridad. Individualmente, muchos no tuvieron su día, pero quizá lo que más se echó en falta es que el banquillo (salvo uno) no estuvo a su nivel habitual.

Citaría tres claves del partido. En la primera incurre lo único en toda la noche que a mí no me gustó del cuerpo técnico: esos minutos de la primera mitad con el quinteto titular en el banquillo, que el Mallorca aprovechó para enfilar, visto y no visto, un parcial de 4-17 (de 15-10 a 19-27) con el que abrió esa distancia de 9-10 puntos en que se mantuvo el resto del partido. Quizá faltó reacción ante esa situación, la segunda unidad esta vez no estaba nada entonada.

La segunda clave vino tras el descanso: vuelves con 7 abajo y con fuerzas para darle la vuelta... pero Mallorca clava tres triples en sus tres primeras posesiones (Bivia 2 y Pampín). Dos de ellos estaban bien defendidos... pero la respuesta a ese empuje inicial era no estar a 7, sino a 11.

Me gustó mucho la fe y el trabajo para remontar en ese cuarto, con todo adverso y el partido al borde de la ruptura. A base de mucho sudar se hizo y recuerdo un 62-65 al inicio del último cuarto. Después de todo, había partido... pero ahí llegó la tercera clave: después de fallar el Clavijo tres contras que parecían diáfanas para empatar, aparece Green y con una facilidad pasmosa clava otros tres triples seguidos: uno al borde de la posesión, otro con un defensor encima, otro desde 9 metros... Sin duda, tiene que ser duro para una defensa hacer bien su trabajo y encontrar tamaña respuesta. Me acuerdo ahora de que me quejé tras aquel partido a principios de liga contra el ADT Tarragona en Logroño, que metieron sus 7 triples y prácticamente todos con el tirador más solo que la una, lanzando cómodamente. Ante Mallorca se palpó que esos problemas ya no existen... pero el rival lanzaba a una piscina.

No quiero acabar sin despejar cualquier duda sobre que esté infravalorando el papel del Mallorca, o haciéndome el conformista con el Clavijo. Ni lo uno ni lo otro. El gran acierto anotador de Mallorca no debe esconder el planteamiento táctico inmenso y el juego fluido, dinámico y con rigor que exhibieron toda la noche para cimentar su triunfo, contando además con el añadido de que su rival no estaba a su nivel habitual.

Una derrota es una derrota, y no hay que darle más vueltas. Igualmente este equipo ha hecho una primera vuelta extraordinaria (haga lo que haga en Oviedo) y matemáticamente jugará la Copa LEB Plata, lo que es un éxito muy muy grande. Queda tener la seguridad de que asegurarán el traérsela a Logroño en la última jornada en Oviedo.

*Dicho todo esto, queda desear a todos los que pasáis por aquí unas muy felices fiestas y que Papá Noel llene vuestros árboles de grandes y caros regalos ;-)

Nos seguimos leyendo, aunque la quiniela me temo que esta vez tendrá que esperar a principios de la semana que viene, sorry.

(foto: Jonatan González)