Rayet Guadalajara. Aquellos recuerdos...

Bueno, vamos rápidamente porque quedan apenas tres horas para el partido. Ya sabéis: CB Clavijo-Rayet Guadalajara, esta noche a partir de las 21 horas en El Palacio (el fin de semana, la cancha está ocupada por el Naturhouse de balonmano y su EHF).

Una anécdota para empezar: el debut del Clavijo en LEB Plata hace siete años fue contra... sí, el Rayet Guadalajara. Fue el 8 de septiembre de 2003, y lo cierto es que no fue un empiece en la categoría nada alentador: perdimos 76-52. Pinchando aquí, tenéis la estadística de aquel partido.
Esa anécdota lleva irremediablemente aparejada otras dos: probablemente, a algunos os 'suene' el nombre del dorsal '6' del Rayet Guadalajara en aquel partido... sí, eso es, un tal Sidnei de Santana, solo que con 20 añitos y recién llegado a España. Un pipiolo, jeje.
La otra lo es menos: quedan tres supervivientes de aquel partido, los tres del Guadalajara, que veremos esta noche Rubén Íñigo, base y gran (y fiel) capitán durante estos años; Sergio Fernández y Diego Pérez.

Siete años dan para mucho, o no. El Clavijo los ha pasado en LEB Plata con más o menos estabilidad y aspiraciones de subir en estos últimos. El Guadalajara vivió sin embargo un duro bache que lo mandó hace cuatro años a la EBA. Esta temporada volvió a la LEB Plata, uno más procedentes de la desintegrada LEB Bronce, donde había pasado dos años.
Pocos apostaban por este equipo a principio de año, pero pasaron el corte, casi in extremis. Lo han hecho sobre todo gracias a dos extranjeros que son de lo mejor de la categoría, como Matt Witt y especialmente Justin Howard (baja hoy), del que hablábamos ayer en este blog; y el apoyo puntual de varios jugones nacionales y veteranos.

Por partes, el puesto de BASE y gran parte de los tiros de su equipo pasan por Matt Witt. Es uno de esos bases americanos, bajitos y eléctricos, con un gran tiro (recuerda a Tony Smith, del Gestibérica Vigo el año pasado). Llegó a mediados de año y su incidencia ha provocado el salto cualitativo de un equipo que no iba del todo bien hasta entonces. Su complemento es ese clásico del equipo llamado Rubén Íñigo, uno de esos jugadores de la casa, veterano y equilibrado en todas las facetas.
El peligro sigue entre los ESCOLTAS y ALEROS, con dos nombres propios. Uno es Joe Alonso, un mito de las ligas LEB, que tuvo su añito de gloria en los 90 en ACB. Un jugón y un cañonero, el año pasado evolucionó en Oro con Illescas, y vuelve ahora a Guadalajara a una categoría que, pese a sus 39 años, le queda pequeña. El otro nombre es Roberto Núñez, uno de esos jugadores 'casi': durante muchos años, en los 90, fue la gran promesa del Real Madrid, pero siempre sin oportunidades. Marchó a la LEGA de Italia, donde se convirtió en uno de los jugadores más destacados de la liga, con anotaciones escandalosas. Explotó y lo repescó el Madrid... para volver a mandarlo al fondo de su banquillo. Tras salir de nuevo, encontró acomodo en las ligas LEB, y hace ya un lustro en Guadalajara. A sus 32 años, no es lo que pudo ser, pero en este equipo le buscan para las pelotas calientes.
Los que quedan por detrás sólo cubren las espaldas, aunque no lo hacen mal. Gente de la casa también, como Diego López, Javir Pérez o Jorge Barra; y el fichaje de este año Carlos Arjonilla, que cuando ha tenido minutos se ha destapado con grandes anotaciones.

En cuanto a los PIVOTS, es obvio que notan la baja de Justin Howard, uno de los referentes de toda la categoría. Sin él, el juego interior se queda cojo y sin referencias claras. Los minutos de Howard se los queda el que era su suplente, Víctor Serrano, recién salido de la cantera de Estudiantes y único interior con altura importante (2,11). En el puesto de '4', tanto Javi Múgica como el clásico del club Sergio Fernández apenas rondan los dos metros de estatura, aunque ambos son rocosos y anotadores.

En definitiva, buen equipo, con un bloque consolidado desde hace muchos muchos años y añadidos interesantes. Con Witt encontraron un equilibrio magnífico, que ahora les chafa la baja de Justin Howard por lesión. Sin éste, se quedan en un equipo muy peligroso por fuera, pero símplemente rocoso por dentro.
En el Clavijo llegan todos a la cita (Herrero con molestias, nada más). Veremos reaparecer a Mediano en El Palacio, lo que no deja de ser un aliciente. Y quedan excusas: este partido es de los que se deben ganar, sí o sí.

(fotos: Joe Alonso, Rubén Íñigo, Matt Witt: fuente: solobasket)