El día después: crónica del circo madrileño y su bufón. La función de este año, sus invitados y el aspirante riojano.

Érase que se era un circo ambulante de esos con funciones contínuas todo el año, y un gran espectáculo central a eso de principios de julio, en Madrid capital. Este año, como siempre, tocaba función, una función esperada por muchos y que, como siempre, depara grandes y jugosas sorpresas.

Para la gran función de este año había 'invitados' nada menos que 120 espectadores de todas partes de España, eso sí, en diferentes modalidades de graderío: 18 para los palcos VIP, 24 para la grada preferente (no muy lejos de aquellos, pero sin refrescos gratis, ojo) y el resto en el gallinero. Sobre el papel, todo muy bonito, con las invitaciones avanzadas al gentío en esa lustrosa página web donde tienen a bien anunciar a menudo otros productos descatalogados de viejas funciones. La realidad, como decimos, no faltó en absoluto a las expectativas.

LA FUNCIÓN

Se trata esta función no de algo común, sino global e interactuando continuamente con los propios invitados, todo un espectáculo fresco y novedoso. ¡¡Bravo por la FE... digooo por el circo!!

La otra gran virtud de esta función radica en que no se trata de un plato único y concreto de un día, sino que se va desarrollando también antes y después.

Así, no se puede entender la función sino como un ente único, contando sus semanas previas. Todo ello ha sido de aúpa. A saber los mejores episodios:

-De los 24 invitados a las gradas preferentes, se han ido cayendo, progresivamente, nada menos que la mitad. Dos de los cuatro que llegaban desde el gallinero (uno de Alfas y otro de Ciudad Real) han renunciado y, curiosamente, uno que el año pasado dijo que se retiraba del gallinero (Mérida) a mitad de año, ahora dice que de hecho, tiene pasta para comprar butaca en grada preferente.

-Dos de los invitados a los palcos VIP, ambos procedentes de las Canarias, anunciaron que se iban a fusionar en uno sólo, y que por tanto, dejaban un palco libre.

-La dirección del circo, por tanto, ofreció el susodicho palco a un invitado procedente de un pequeño pueblo almeriense (Tijola) que en principio tenía reserva en un muy buen asiento de la grada preferente. Así, primero el invitado se alborozó con la noticia, luego dijo que rechazaba el palco porque la entrada era demasiado cara, y finalmente, a apenas dos días de confirmar la invitación, dijo que sí, que se lo quedaba, que ya buscaría dinero para pagar a plazos.

-Pero hete aquí que los fusionarios canarios resultaron no ser tales. El día de la función, a última hora, aparecieron los dos, quizá 'desfusionados', y reclamaron sus palcos.

-Con ello, la dirección del circo se encuentra ante un problema: tiene dos invitados a palco fusionados en uno que en realidad son dos, y por otro lado un no invitado a palco al que finalmente se le ofreció un palco que, en realidad, ya estaba ocupado. ¿Construirán otro palco?

-Ojo, hay más: un reciente y legítimo poseedor de palco, procedente de Alcázar de San Juan, tras gastarse una fortuna el año pasado en dejar inmaculado su asiento en preferente, ahora se veía sin un duro ni ayudas para el palco. Así que lo dejaron claro: o palco o nos quedamos sin función este año. Sin problemas: una cenita con el preboste de la comunidad el día antes, y todo resuelto. Habrá palco.

-Por cierto, que a ese preboste de esa comunidad habría que recordarle que tenía otros dos invitados en la comunidad, ambos en grada preferente: uno en Ciudad Real y otro en Guadalajara. Mira por dónde que a esos los ha dejado morir: ambos van directos al gallinero.

-Faltaba la gran sorpresa del año, y fue jugosa: había un ocupante de palco en Lleida que el año pasado renunció y marchó directo al gallinero. Ahora, cuando nadie le esperaba, apareció diciendo que le compraba la invitación al invitado de Cornellá, que bien podía tener palco o grada. Oiga, que al final no hay palco. Ahí nos quedamos. ¿gallinero?

-A todo esto, un par de ocupantes de grada preferente, en Navarra y Coruña, empezaron a sondear palcos. El primero, por méritos propios; el otro, no se sabe muy bien por qué motivo. Los vecinos navarros se vieron estrenando palco antes de ayer mismo. Ilusos. En este circo, lo que hoy es negro, mañana es blanco: se quedan en grada. ¿O no?

- La última fue tremenda. Sucedió en Vigo: hete aquí un invitado que, tras años despilfarrando los dineros en la grada preferente, el año pasado se encaramó a un palco, no sé sabe muy bien cómo. Por supuesto, ni con qué dinero: en sólo un mes empezaron sus problemas. Pero da igual. Hacía meses que por deméritos propios se largaban a la grada de vuelta, con una importante deuda y discusiones públicas con su sponsor. ¿Y? Este verano optaron de nuevo a palco. Pero esta vez nadie se lo ha creído y se quedan fuera del gallinero. Ojo: la dirección del circo sí lo veía con buenos ojos. Mientras pagaran la entrada y consumisión...

EL BUFÓN

Ningún circo se precia sin su entrañable bufón particular. El de este gran circo es un señorito con pintas de drácula y sonrisa picarona. Pero cuidado, que no busca cuellos que morder, sino carteras de los pobres idiotas en cuyas caras se ríe cada verano: los invitados.

Lamento las faltas de respeto, pero no son sino una respuesta a la falta de respeto hacia mi persona (y resto de aficionados) y, peor aún, el insulto a nuestra inteligencia perpetrado desde el circo que dirige:

El insulto es éste. Pinchar aquí.

Sin más, cabe extraer algunas perlas:

-'La estabilidad del baloncesto español y la colaboración entre clubes y Federaciones Autonómicas, coordinadas por la FEB, han hecho posible que las competiciones nacionales tengan más peticiones que plazas para confirmar su configuración cara a la temporada 2010/2011'

(debió olvidar que le queda media grada preferente vacía, y un gallinero con zonas sobredimensionadas y otras vacías)

- 'La Adecco Oro, una Liga con lista de espera para la que se presentaron más peticiones que las 18 plazas disponibles'

(se presentaron más peticiones, en buena parte, porque TÚ las ofreciste. Es más: alguna incluso la has dado. Así que no hay más peticiones que plazas: TÚ has ofrecido más plazas de las que resultaste tener)

-'la Adecco Plata parece acercarse a la consolidación de su estructura tradicional con un solo grupo, lo que, además de redimensionar su repercusión, reajustaría positivamente los costes de desplazamiento de los equipos participantes'

(¿la acercas tú, o es que no te quedan más huevos que acercarla? Y si este acercamiento 'redimensiona su repercusión y reajustaría positivamente los costes de desplazamiento', como bien dices, ¿¿ENTONCES POR QUÉ COJONES QUERÍAS ORGANIZAR UNA LIGA CON DOS GRUPOS Y EL DOBLE DE EQUIPOS??)

-'cuando esta apasionante competición cumple una década de vida parece regresar a un atractivo sistema de liga que ha demostrado su eficacia en 9 de las 10 ediciones precedentes'

(Lo dicho: mi mamá, que es muy lista, a menudo dice aquello de 'lo que funciona no se toca'. Si era un atractivo sistema que había demostrado su eficacia, ¿¿PORQUÉ COJONES LO CAMBIASTE?? Ah, que eran más equipos y te daban más pasta. Claro...)

-'mientras que la pirámide masculina se completará con la Liga EBA, en la que casi un centenar de equipos seguirán llevando el baloncesto de elite a todos los rincones de la geografía nacional'

(¿Pirámide?¿acaso crees que somos subnormales todos?¿o es que eres tan subnormal que te crees que el resto son igual de tontos y no se enteran? A mí en el cole me enseñaron que una pirámide es como un triangulito de esos tan monos que de forma equilibrada, se va agrandando a medida que desciende a su superficie. Pues bien, será que soy demasiado idiota pero con los datos de una LEB Oro de 19 equipos, una LEB Plata de 12 y una EBA de 100 pero con zonas donde hay de más y zonas donde faltan un montón... PUES JODER, YO NO VEO LA PIRÁMIDE POR NINGÚN LADO).

EL INVITADO RIOJANO

Sí, había un invitado riojano, con plaza fija en grada preferente desde hace años. Como hace ya un par de veranos, se ha estado 'hablando' de la idea de que consiguieran un palco VIP, que ya tocaba. Pero este año tampoco va a ser.

Por mi parte, no pongo en duda que se hayan hecho los máximos esfuerzos por conseguir ese palco. Mi única crítica es la ya conocida falta de presencia mediática para contarlo. Envidia me han dado nuestros vecinos navarros, en muy similar situación a la nuestra, saliendo un día sí y otro también, en todos los medios de comunicación, para transmitir la ilusión de conseguir un palco. Aquí ni fu ni fa. Y se trata de la puñetera realidad: si no estás caliente en los medios de comunicación (por aquello de generar la famosa presión social), tu posición en los despachos (a la hora de pedir pasta) se enfría como el témpano.

Tampoco cabe azotar a las administraciones por esto. Como aficionado, sería el más feliz del mundo si en vez de dedicar 200 millones de euros en esa historia del I+D+i (que ya existía desde que existe el mundo empresarial, pero ahora por lo visto cuesta dinero público), invirtieran 199'2 en ello, y 800.000 euros en mi equipo para que accediera a un palco. Pero claro, al tío de mi lado, que ni le va ni le viene el baloncesto, probablemente le joda que se gasten SU dinero en estas historias. Y con razón.

De todas formas, no nos engañemos: en este vilipendidado deporte, la verdadera innovación la hacen en el verano los de los despachos para convencer a los distintos inversores a que les dejen dinero en ese raro sueño que luego el circo de Madrid convierte sin tapujos en mala broma pesada.

EN RESUMEN

Que por aquí seguiremos como estábamos. Mismas penurias, poca gente ilusionada, ciscos con los árbitros, y posible sueño frustrado a final de temporada por algún nuevo rico surgido de la nada y con dudosos dineros a espuertas para ganarse un palco. Y si no, ya lo comprará el verano que viene.

En cuanto al circo madrileño y su bufón, la credibilidad se torna a casi nula, y a muy parecida velocidad que lo hace el interés por sus competiciones. Es bueno el poderío económico como factor integrante del cóctel de cada deporte, elemento mediatizador. Pero sólo eso: que no sea decisivo, como es este triste caso.

Claro está, el bufón no ve más abajo de su tripa, y por encima de ella sólo está una cosita llamada 'selección española'. Lo de por debajo se reduce a poner la mano cada verano y que caigan los euros: ¿que hay crisis? da igual, el precio de las entradas es el mismo, pero páguelo a plazos si quiere y se irá usted a la mierda, en vez de en julio, en noviembre.

El problema para los que nos cabreamos con esta pantomima no es otro que el medio plazo. Pongamos que el Barça de fútbol se carga de pronto su famosa Masía; el primer equipo seguiría acaparando éxitos por igual, y no sería hasta pasados unos años cuando todo se iría al garete porque no hay nuevos talentos de la cantera. Pero pasados unos años.

En el basket ese Barça triunfal es la selección española. ¿Y su Masía, su cantera? De unos años a esta parte, salvo la LEB Oro (que por cierto, ya ponemos en duda lo de 'la quinta mejor liga de Europa', hay unas cuantas que son bastante más 'serias') nos encontramos un popurrí de categorías y equipos que aparecen y desaparecen y, por supuesto, viejas glorias, americanos y equipos fantasma hechos a golpe de talonario, copando esa liga EBA supuesta cuna del nuevo talento español.

Así que espero que en unos años me equivoque, una vez más. Porque lo peor es que si estoy en lo cierto, probablemente el bufón ya esté recostado en su sofá disfrutando de una jugosa (y merecida, por supuesto) jubilación tras años de apasionantes funciones circenses.